En los años veinte, D. Salvador Rus, quien ya venía trabajando en años anteriores junto a su padre, recibe el encargo de hacerse cargo de su primera obra de forma independiente, lo que afronta con una sorprendente capacidad técnica y autonomía personal. En poco tiempo, el recién nacido empresario andaluz lleva a cabo algunas obras de caminos y puentes, e intuye que el sector de la obra pública puede ser una buena oportunidad profesional y empresarial. Se presenta con éxito a los primeros concursos públicos, y realiza varias obras de cierta envergadura en la Sierra Norte de Sevilla y la serranía de Cádiz, entre las que destaca el puente de Coripe sobre el río Guadalporcún.

D. Salvador Rus afronta la nueva década con gran optimismo al ver cómo crecen las obras. Sin embargo, esta tendencia se ve interrumpida por la contienda civil, que D. Salvador logra superar gracias a su empuje, tesón y sentido del trabajo ya sobradamente demostrados y que le hicieron merecedor muchos años después de una Medalla al Mérito en el Trabajo

La empresa de D. Salvador Rus, que cuenta ya con una importante experiencia en el ámbito de la construcción en las provincias de Cádiz, Huelva y Sevilla, figura entre otras tantas que son llamadas para la reconstrucción del país. Se abre en los próximos años una excelente oportunidad para dar un nuevo impulso a la empresa, que experimenta un crecimiento muy importante durante ésta y la próxima  década de 1950

La nueva ley de sociedades anónimas promulgada en España en 1953 constituyó para D. Salvador Rus el cauce legal para dar forma jurídica a su proyecto, y bajo el nombre de Salvador Rus López Construcciones S.A., constituyó la empresa con la que desplegaría su gran actividad durante esta década. Asume en Andalucía una importante cartera de obras. Sobre todo, carreteras. También importantes infraestructuras hidráulicas.

En los años 60 D. Salvador Rus entiende que debe ir trasladando a sus hijos responsabilidades de gobierno en la empresa familiar, y decide asignar a sus hijos Salvador, Manuel, Antonio Miguel y Joaquín, todavía muy jóvenes, las áreas de obra pública, producción y edificación respectivamente. Son años de esplendor y la empresa sigue creciendo al mando ya de la segunda generación de la familia.

Con la segunda generación al frente de la empresa familiar la empresa logra gestionar con gran acierto las dificultades sobrevenidas de la crisis del petróleo y la consecuente crisis económica internacional que afecta duramente a España. La empresa logra entonces algo inaudito: consigue levantar un concurso de acreedores sin haber dejado de pagar un solo salario, lo que convierte a la empresa familiar en modelo de gestión, eficacia y resistencia. Como resultado de esta nueva estrategia, la familia Rus crea HELIOPOL.

La obra pública remonta en España y especialmente en Andalucía, donde se inician los preparativos de la EXPO’92. La solidez y experiencia que ha acumulado la empresa le permite participar en la construcción de las nuevas infraestructuras que articularán toda la región, como algunos tramos de la A-4, A-49 y A-92.

El crecimiento que experimenta el sector de la construcción en la década de los 90 y primeros años del siglo XXI favorece nuevamente el despegue y consolidación de la compañía. Con el objetivo de reordenar el negocio y facilitar el acceso de la tercera generación familiar a la gestión de la empresa, la familia Rus Velázquez crea Grupo Salvador Rus y en 1997 culmina con éxito su protocolo familiar. Se desinvierte en los activos industriales de aglomerado y canteras, y se diversifica. En 1997 nace el GRUPO RUSVEL.

Ante el horizonte de negocio que se abre con la nueva década y una singular visión de futuro, la empresa adopta una estrategia de diversificación y venta de activos con escaso recorrido, lo que le proporciona un nuevo crecimiento en volumen de negocio y la consolidación del proyecto familiar.

La actividad de GRUPO RUSVEL en el sector inmobiliario le proporciona una nueva línea de negocio con excelentes resultados, que consolida en 2010 con la creación de RGI, una compañía fuertemente especializada en la promoción y gestión de activos inmobiliarios.

El holding familiar también se posiciona en el sector de las energías renovables con la filial AGE, donde logra algunos buenos resultados y, sobre todo, una experiencia que desemboca en la próxima década en dos nuevas líneas de negocio: la obra hidráulica (MAREA) y la gestión de residuos orgánicos (AVINSUR).

La empresa HELIOPOL, considerada el motor económico y columna vertebral del grupo, experimenta sucesivos crecimientos durante estos años, lo que otorga al proyecto familiar una solidez excepcional que, unida a la modernización de sus estructuras y gestión, le permite afrontar la nueva década con la mayor garantía de éxito. HELIOPOL consigue una gran penetración en el negocio privado desarrollando entre 2017 y 2020 más de 170 millones de € en obras.

En 2020 GRUPO RUSVEL está a punto de cumplir cien años de historia, lo que le convierte en el grupo global empresarial de origen familiar más antiguo y consolidado de Andalucía.

Bajo las directrices de su Plan Estratégico 2017-2021, GRUPO RUSVEL  sigue apostando por la diversificación hacia los sectores medioambientales, a la vez que continúa creciendo la empresa constructora, su principal motor.

Apoyado en el binomio HELIOPOL – RGI, en esta década se lanza un nuevo enfoque de negocio: “la gestión global de proyectos”, dirigido a clientes privados, y garantizando a los desarrollos inmobiliarios privados un control total de los proyectos desde el planeamiento hasta la construcción.

Se consolida en estos años la apuesta de GRUPO RUSVEL por la diversificación: adquiriendo un gran desarrollo y posicionamiento en las líneas de negocio de medio ambiente, residuos y agua, al tiempo que siguen desarrollando y creciendo en volumen de negocio sus empresas líderes: HELIOPOL y RGI.

Junto a esto, se inicia el Plan de Transformación Digital con el objetivo estratégico para la próxima década de consolidar a GRUPO RUSVEL como uno de los principales grupos de empresas de construcción, servicios y medio ambiente.